Los productos alimenticios nutricionales más seguros son aquellos que cumplen con estrictos estándares de calidad y seguridad alimentaria. Para garantizar la seguridad en el hogar, es esencial seguir prácticas adecuadas de manipulación y almacenamiento, como mantener la limpieza y evitar la contaminación cruzada. Además, aplicar las mejores prácticas de almacenamiento ayuda a mantener los alimentos frescos y seguros para el consumo.